Yo ya escribí un artículo que se titulaba
“Yo quiero el Espíritu Santo”, pero hoy le diré que el Espíritu Santo te quiere.
A veces la persona queda llena de enigmas
en la cabeza, pensando que el Espíritu Santo está lejos de ella, que es algo
imposible de alcanzar.
¿Y si le digo que Él le desea tanto o más
de lo que usted a Él?
¿Entonces qué es lo que está impidiendo
que acontezca el derramamiento del Espíritu en su vida?
Pueden ser dudas, incredulidad, o algún
pecado que la persona esté cometiendo, que la separa de Dios.
El Espíritu Santo no es nada complicado,
no exige habitar en personas perfectas, aún Él siendo santo, puro y perfecto.
Él quiere habitar en nosotros, Él nos
fue prometido.
Deje de pensar en su pasado, o que no es
merecedora, y comience a buscar.
Usted simplemente tiene que creer,
entregarse sin reservas y desearlo con todas las fuerzas, y Él vendrá.
¿Ya pensó en el privilegio? El Espíritu
Santo le quiere mucho.
“respondió Juan, diciendo a todos: Yo a
la verdad os bautizo en agua; pero viene uno más poderoso que yo, de quien no
soy digno de desatar la correa de su calzado; él os bautizará en Espíritu Santo
y fuego.” Lucas 3:16
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