¿Qué estarías dispuesta a hacer para cumplir tu sueño? Y
si yo te dijera que para conquistar lo que deseas solo precisas hacer una cosa:
Dejar a aquella amiga que sabes que no te hace bien, o
dejar de mirar televisión por un mes, o cambiar todo tu guardarropa para
vestirte con un look más discreto. Y si
yo dijera que para que tu sueño se realice, precisarías ayudar a tu mamá todos
los días y leer un libro de 500 páginas, ¿estarías dispuesta a cumplir con lo
que fue pedido para alcanzarlo, si este sueño
fuese un viaje a Disney o a Cancún?,
tal vez una casa propia, o todavía algo mejor, una mansión, un auto
importado, tener condiciones para estudiar en la mejor universidad del mundo…
¿Pagarías el precio pedido, que en verdad no es tan difícil? Creo que todas
pagarían el precio porque no es algo imposible, sino que son tonterías y cosas
fáciles de hacer, ¿no es cierto? ¡Imagínate, quedarte sin mirar tv por un mes y
después recibir la casa propia! O leer un libro de 500 páginas y ayudar a tu mamá
y poder ir a Disney! ¿Quién no pagaría un precio tan irrisorio?
¿Se dieron cuenta que cuando se trata de un objetivo visible,
palpable y terrenal pagamos cualquier precio para alcanzarlo y no sentimos que
es algo difícil? Por el contrario, incluso pensamos que es una tontería, ¿no es
cierto? Pero cuando se trata de hacer para Dios, para alcanzar algo con un
valor mucho mayor que cualquier sueño que podamos tener, por algo espiritual,
todo parece más difícil, más pesado e imposible de hacer. ¿Por qué? Porque
nuestra mente no consigue ni siquiera imaginar la grandeza de aquello que Dios
tiene preparado para nosotros allá en el
cielo. Nuestros ojos nunca vieron cosa parecida a la belleza y magnitud de
nuestro Dios y todas las cosas que Él nos puede dar y por eso muchas personas
no logran sacrificar lo mínimo para Él, pues todavía no entendieron eso.
Además, tenemos el diablo para impedirlo y hacernos pensar que es muy difícil y
que lo que Dios nos pide es una carga muy pesada. Pero es curioso, cuando es para
levantarse de madrugada para ir a un paseo, no hay cansancio ni tristeza, pero
cuando es para ir a la Iglesia ¡qué dificultad para levantarse de la cama!
El secreto amigas es entrenar sus mentes. Comienza a
imaginar el cielo. Imagina a Dios y todo Su reino. Imagina a los ángeles y la
belleza de las cosas celestiales. Imagina lo que Dios tiene preparado para
aquellos que Lo aman verdaderamente. Imagina cómo será tu vida en el cielo. Sin
dolor, sin lágrimas, sufrimientos, competencias ni comparaciones. Imagina a
Dios esperándote de brazos abiertos como un padre que te ama. ¿Será que lo que
Dios nos pide es tan difícil al punto de no lograr hacerlo? ¿Será que nuestra
salvación vale menos que un programa de tv, una ropa, una amiga o un novio?
¿Será que leer la Biblia, hacer el ayuno de Daniel, ir a la Iglesia, apartarse
de las cosas equivocadas, es algo tan feo para hacer que es mejor ir al
infierno y perder la realización del mayor sueño que un ser humano pueda tener?
Queridas, vamos a cambiar nuestra manera de pensar.
Cuando entendemos la grandeza de Dios y el verdadero valor de nuestra
salvación, no hay nada difícil ni pesado que valga más que ella. Piensen en eso
amigas, y vamos a entrenar nuestra mente para visualizar las grandezas que Dios
ha preparado para los vencedores y compare si su amiga, el novio, o lo que sea
que esté entre usted y Dios vale más. El único que no quiere que conquistes el
mayor bien que podamos tener es el diablo, no le des con el gusto. Invierte en
tu bautismo con el Espíritu Santo, solo así conseguirás entender ese valor tan
grande de las cosas espirituales.
Un beso grande a
todas y hasta la semana que viene.
Mediten en este
versículo: “Cosas que ojo no
vio, ni oído oyó, ni
han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le
aman”. (1 corintios 2:9)
Ah, todavía quiero ver el diario de ustedes, ¿ok? Posteen en
mi página. Besos
Juliana Furucho
Juliana Furucho
Traducido por: Milena Pignatta
9 comments:
La mente humana no alcanza a imaginar las grandezas que Dios tiene para nosotros,por eso naturalmente surgen las "Excusas" y los "limites"
Hacemos cualquier cosa por conseguir lo material,lo que vemos,tocamos y podemos disfrutar efimeramente pero con las cosas de Dios demostramos debilidad,tenemos que cambiar de mentalidad.Dios tiene cosas grandes para nosotros pero nos limitamos y ponemos barreras.
Asi es señora aveces las personas prefieren sacrificar para las cosas terrenales y no para Recibir lo mas importante que existe que es la salvacion eterna
La salvacion es el principal objetivo de ser logrado porque lo material que conquistemos pasa pero la salvacion es eterna.
Entonces no hay precio que tenga que pagar.
Es muy cierto, muchas veces uno se deja llevar por los pensamientos y cree que es difícil hacer cosas sencillas para Dios, mas sí hace de todo por lo que es del mundo, a pesar de que esto no sea malo. Uno deja de valorar aquello que Dios ofrece, por valorar más aquello que está en éste mundo
Es así como dice es mucho mas fácil sacrificarse por lo que se ve que por lo que no pero las cosas que tengas envejecen se rompen mas lo que Dios tiene para uno es eterno que es una vida junto a El.
Si las personas pensarán con la mente y se imaginarán a Dios y todo su reino y todo lo que Dios tiene preparado ahí, lugar donde no hay dolor ni sufrimiento.
Dios esta esperando con los brazos abiertos. Nuestra salvación vale más que todo.
Hay que leer la Biblia hacer el ayuno de Daniel, apartarse de las cosas equivocadas y principalmente hay q sacrificar para Dios.
Buenos dias.
Muy buen articulo, para meditar, cuanta razón existe en esas palabras.
Disculpen, a que diario se refiere la Sra.? soy nueva en la pág.
De verdad que no vale la pena perder la bendición eterna que DIOS tiene preparado para nosotros por las cosas pasajeras que nos ofrece este mundo!
La salvacion es el principal objetivo de ser logrado porque lo material que conquistemos pasa pero la salvacion es eterna.
Entonces no hay precio que tenga que pagar.
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