El nombre Daniel significa “Dios
es mi juez”, después de ser juzgado y condenado por los hombres, Daniel fue
lanzado a la cueva de los leones.
Pero el justo Juez lo libró de
la muerte, o sea que no importa lo que decidan para nuestra vida, Dios siempre
tendrá la última palabra. Vemos la importancia de ser llenas del Espíritu y
vivir en espíritu, pues aunque el mal nos quiera atacar, usar situaciones para
perjudicarnos, como sucedió con Daniel, Dios será nuestro juez y nos librará de
todas.
Estaba meditando cómo habrá sido
la vida de Daniel para alcanzar tamaña intimidad con Dios, y la palabra que me
vino fue la siguiente, él vivía y andaba en Espíritu.
“Si el Espíritu nos da vida, andemos guiados por el
Espíritu.” (Gl 5.25)
Vivir es tener vida, existir,
entonces vivir en Espíritu es estar
en el centro de la voluntad de Dios, en comunión y dependencia de Dios, es la
existencia de Dios dentro de nosotros.
Andar significa caminar, moverse,
entonces andar en Espíritu es vivir
en la práctica de la santidad, matar nuestra carne todos los días, ser santo en
nuestras actitudes, comportamiento, pensamientos, manera de actuar, de mirar,
de juzgar. Es andar en contramano de este mundo.
En resumen, si vivimos en
Espíritu, o sea en comunión con Dios, eso tiene que reflejarse en la práctica,
en nuestras actitudes diarias, en nuestra manera de vivir.
Digamos que el vivir es en
nuestro interior y en la práctica de la obediencia diaria.
Eso es vivir y andar en
Espíritu, y Daniel es un gran ejemplo de eso.
¿Usted ha vivido y andado en
Espíritu?
3 comments:
Es decir vivir en espíritu las 24 horas del día
Yo en andado siempre en Espíritu, Dios el siempre me a librado del mal.
Mis pensamientos siempre esta con Dios.
No debo olvidar estar siempre en Espiritu de Dios ya que el es mi fuerza, direccion y la vida misma por lo cual siempre debo estar a los pies de mi Señor nuestro Dios.
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