Hola chicas, ¿todo bien? Hoy me gustaría comenzar con un
versículo muy interesante, que lo oí por primera vez cuando todavía era muy
joven y jamás me olvidé:
“Atrapen a las zorras, a
esas zorras pequeñas que arruinan nuestros viñedos, nuestros
viñedos en flor”.
(Cantares 2:5)
¿Saben amigas? Esta semana estuve meditando en algo muy
fuerte e importante para nuestras vidas y me acordé de este versículo que oí
hace muchos años y Dios me lo recordó
para pasárselo a ustedes. Hoy en día, he visto que muchas cosas que antes
considerábamos como equivocadas, se volvieron normales y aceptables. Noten que
en el versículo dice que debemos “atrapar a las zorras que arruinan los
viñedos”. ¿Por qué zorras? Porque normalmente las personas se preocupan con los
animales grandes, pero se olvidan de las zorras que logran entrar y destruir la
viña. ¿Y qué son las zorritas? Son las
mentiritas, murmuraciones, malos ojos, chismes,
envidia, el querer hacerle mal a una cierta persona porque alguien no
acepta que esté mejor que ella y por eso habla mal, son los programas de TV
llenos de cosas del diablo, canciones con letras horribles, las cosas malas que
se ven en internet, la pereza de leer la Biblia, de orar, de ir a la Iglesia…
Todo eso son las zorras que la mayoría de la gente descuida y son exactamente
ellas las que de a poco van destruyendo los viñedos (que somos cada uno de
nosotros) hasta llegar al punto de perder la visión espiritual, la santidad y
la pureza y consecuentemente, perder la salvación.
Si tú has acompañado mis posts, vas a percibir que mi
mayor preocupación es mostrarte las artimañas del diablo y así abrirte los ojos
para que tú no pierdas la salvación y hoy, una vez más vengo a alertarte sobre
las zorritas… ¿cuál es la zorrita que has detectado en tu vida? Amigas, no
importa si todo el mundo que tú conoces está haciendo las cosas mal, lo que es
equivocado es equivocado y no lo debemos seguir. Las personas siempre van a
buscar una manera de satisfacer su carne enmascarando lo que está mal con lo
correcto, pues es más agradable que ser obediente a Dios y cortar con lo malo
aunque duela. La naturaleza humana siempre buscará el camino más fácil, siempre
busca conciliar su voluntad con las cosas de Dios y por eso miran hacia los
demás, pues si fulano lo hace, entonces no está mal y puedo hacerlo también. ¿Pero
quien dijo que fulano está preocupado con las zorritas? Queridas, no tenemos
que mirar la vida de nadie, tenemos que ser fieles a Jesús, seguir sus
mandamientos sin querer agradar a nuestra carne o querer enmascarar lo malo con
lo correcto.
Lo que Dios nos pide es santidad, pureza y que nos
apartemos de las cosas equivocadas para que cuando Él venga a buscarnos o
cuando llegue nuestro momento de partir, podamos estar con nuestras vestiduras
limpias, para nuestro amado Salvador. Lo interesante de este versículo es que
el capítulo comienza hablando del gran amor que nuestro Amado Señor tiene por
nosotros y en el medio del capítulo donde expresa ese amor maravilloso, viene
ese alerta. ¿Será que fue por casualidad que el alerta está ahí? No amigas,
Dios es perfecto y sabe que cuanto más queremos agradar a Dios, el diablo más
va a querer engañarnos con las zorritas, queriendo hacernos pensar que no tiene
nada de malo, que es normal, que todo el mundo lo hace… Y como mi mamá me
decía, yo les digo a ustedes: nosotros no somos todo el mundo ja ja ja. Vamos a
vigilar y cuidar nuestra santidad, mantengamos nuestras vestiduras limpias,
¿ok?
Mis flores, espero haberlas alertado para el cuidado de
sus vidas. Un beso grande y hasta la semana que viene.
Juliana Furucho
Traducido por: Milena Pignatta
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