Hoy me gustaría resaltar dos tipos de amistades, una que busca su interés y aquella que tiene sus límites, por supuesto, claro que ambas no son sinceras ni deseadas por nadie.
La primera es aquella que siempre tiene segundas intenciones, o sea mientras la persona pueda obtener algo de usted ella está ahí, cuando ella ve que usted no tiene nada más para ofrecerle simplemente se aparta y busca otra amistad que le puede dar lo que ella está buscando o lo que pueda favorecerle.
Estas son las que normalmente quieren ser amigas de quien es influyente o ocupa alguna posición de destaque.
Esta persona no es amiga de verdad y consecuentemente también no consigue hacer amistades verdaderas, pues ella solo está allí para recibir y no para dar, es una amistad egoísta e interesada.
Amistades desinteresadas son reales, puras y sinceras, debemos ser amigas y buscar lo mismo para nuestras vidas.
La segunda es la amistad que se da por la mitad, ella tiene sus límites, desde que usted haga todo lo que a ella le agrade y no estropee sus planes, todo está bien, ah y tiene más, debe concordar con ella en todo, pues ella no acepta su sinceridad. Por otro lado, si algo sucede fuera de sus expectativas ella es la primera en criticar y juzgar, mostrando así que no es una verdadera amiga.
Ella quiere todo de usted, pero no corresponde de la misma manera, es el tipo de chupasangre, cuando usted piensa que puede contar con ella, ¿dónde está?
¿Cómo reaccionar ante esta situación? Lo importante es tener la conciencia de que fue sincera, si la persona no respondió de la misma manera, demostró que no era amiga de verdad, entonces seguimos enfrente, a fin de cuentas, ¿para que una amistad así?
Quién es espiritual, busca amigas espirituales que añaden a su vida, quien es carnal se junta con quien presenta la misma condición, al final ellas se entienden bien, el oído de una le gusta escuchar lo que sale de la boca de la otra, la carne se une con la carne.
Seamos amigas sinceras.
2 comments:
hola señora en verdad que si esta en todo lo cierto,debemos de fijarnos con quien nos juntamos y ser mas atentas en ello
señora tiene toda la razón. y convivir con personas asi todos los dias en el trabajo no es fácil. pero con Jesús se puede
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