La Lengua Indiscreta – la persona que es discreta muestra prudencia y autocontrol cuando habla. La indiscreción puede ser costosa, debido a que hay temas que no deben ser mencionados delante de todos. No debemos exponer o revelar asuntos de otras personas que no nos conciernen. Tener conocimiento de ciertas cosas íntimas o personales de una persona, no nos da el derecho de hablar acerca de ellas frente a terceros.
“La discreción te guardará; te preservara la inteligencia.” Proverbios 2:11
La Lengua Crítica – hay personas que se dedican a buscar los defectos de los demás, con la sola intención de criticar. Quien se dedica a esto último, ocupa su tiempo en observar el comportamiento de otros, captando el más mínimo detalle, analizando cosas que, por pequeñas que sean, le sirvan para criticar y así quedarse satisfecho. A veces, juzgamos basados en rumores que escuchamos, los cuales no siempre son verdaderos. Tendemos a criticar a otros cuando consideramos que el comportamiento o actitud de la persona no es correcto, de acuerdo a nuestro punto de vista.
“No juzguéis para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con que juzgáis seréis juzgados.” Mateo 7:1-2
La Lengua Quejumbrosa – ¿ya conviviste con una persona que murmura todo el tiempo? Es muy desagradable, se queja de todo, siempre pone defectos, parece que está malhumorada con el mundo.
Cuidado, porque la queja es contagiosa. Si estamos cerca de una persona con este comportamiento, la tendencia es que hagamos lo mismo.
Si tenemos alguna queja seria, debemos sí, presentarla ante Dios y no andar murmurando.
“…Delante de Él expondré mi queja; delante de Él manifestaré mi angustia.”
Salmo 142:2
En el próximo articulo hablaremos de cómo controlar la lengua.
2 comments:
gracias,estas enseñanzas me ayudan a formar en mi el verdadero caracter de una mujer de Dios...
Gracias por todas estas enseñanzas, es muy importante tenerlas en cuenta para formarnos como mujeres virtuosas.
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