sábado, 7 de noviembre de 2015

Consejos de buena convivencia para quien divide el hogar

Dividir el hogar con alguien no es tarea fácil. Será que usted consigue?
La necesidad de dividir la casa puede surgir cuando es necesario dejar su casa para estudia en otra ciudad, o tal vez por el deseo de tener más autonomía o por contratiempos de la vida.
Eso es común en los días actuales. Residir con personas de cultura y hábitos diferentes, no es una tarea fácil, pero tampoco es imposible.
Yo escogí escribir sobre este asunto, ya que tener buena convivencia debe hacer parte de nuestro día a día sin que sea un “bicho de siete cabezas”. Puedo hablar por experiencias vividas durante años. Cómo hice? Fue fácil? Tuve que renunciar? Qué cambió?… Sí, yo se, son muchas preguntas. No daré ejemplos de situaciones que sucedieron conmigo. Sugiero algunas formas de lidiar con esa situación para que usted y quien vive con usted tengan una vida tranquila, evitando posibles problemas. 
Antes de todo si usted va a crear una situación como esta, necesita preguntar lo siguiente: “Estoy dispuesto/a a enfrentar las situaciones que acompañan esta decisión?” Dividir su espacio puede ser práctico y divertido, pero es trabajoso.
La privacidad será menor y aceptar las costumbres y hábitos extraños no es fácil. Para que yo pueda tener una buena convivencia, tuve que volverme una mejor persona.
Siendo así, para tener una buena convivencia necesitamos de esto: tener paciencia y respetar el espacio del otro. Cuando usted administre eso, no tendrá ningún problema.
Algunas de mis sugerencias de lo que usted puede poner en práctica en la rutina de la casa y evitar conflictos, con algunos cuidados es posible y hacer con que eso sea más agradable de lo que parece ser. Todos tienen que hacer renuncias para la buena convivencia.
En las próximas semanas estaré escribiendo más sobre dada asunto relacionado al tiempo de hoy, pues tenemos mucho para hablar con respecto a dividir el hogar. Espero que nos acompañe durante las próximas semanas.

Evitando “confusiones”
Comida: Nunca podemos imponer nada. No es una actitud justa impedir a alguien de hacer lo que le gusta comer. En este caso lo mejor es hacer y aprender a renunciar. Todos los lados acaban renunciando. Imagine si yo impongo eso para mi marido, diciéndole a él que no va a fritar huevo, porque a mi mi me gusta el olor de huevo en la casa! Eso no es una acción correcta. Debo respetarlo, así como él también hace cuando es algo que a mi me gusta y a él no.
Finanzas: Para evitar problemas como conflictos sobre el pago de alguna cuenta, es esencial mantener todo organizado y bien registrado. Llegaron las cuentas referente a los gastos de la casa, todos pueden tener acceso y juntos hacer la división exacta.
En este caso lo mejor es dividir por igual los gastos de las cuentas tales como agua, luz, internet o las cuales corresponden a su domicilio. Se pueden hacer planillas para mantener los valores registrados con acceso para todos. Otra sugerencia es hacer recibos para que no haya el problema de que alguien diga que pagó algo que no pagó o comprar algo que el otro ya pagó. Por esos motivos es importante mantener todo muy bien organizado y anotado, nunca “dejar para allá” cuando el asunto es finanzas. Y cuando se trata de compras de la casa, lo que fuera común para todos (productos de limpieza, la comida principal por ejemplo, etc) puede ser dividido igualmente, en cuanto a los otros ítems de consumo personal puede ser pagado por quien los adquirió. 

Divida las responsabilidades
Así como la responsabilidad por las cuentas tienen que ser de ambos, la responsabilidad de limpiar y organizar la casa también necesita ser distribuída. Ustedes pueden dividir por semana (cada una limpia en una semana), o dividir por actividad (cuando una limpia la sala otra limpia la cocina). Aunque sabiendo que su semana es corrida por causa del trabajo y/o estudio, usted debe procurar cumplir lo que fue combinado. Siempre recordando que en este caso entra la regla: Si usted desordena, ARREGLE. Si usted ensució, LIMPIE.
Esa división de tareas necesita ser muy bien aclarada, pero puede ser flexible dependiendo el nivel de relacionamiento entre ustedes. Vale recordar que si no fuera su semana de hacer la limpieza usted no puede abusar ensuciando y desordenando toda la casa, tenga consideración por la persona que divide el hogar con usted. Eso se resume en respetar. Sabe por qué hay tantas confusiones y desacuerdos? Justo aquí, cuando solo pensamos en nosotros. Yo no tengo el derecho de hacer aquello que no me gustaría que hiciesen conmigo. Una manera de mantener la misión organizada es teniendo una lista donde ustedes pueden anotar lo que es responsabilidad de cada una y releer cuando estuvieran con dudas.
Voy a dejar alguna fotitos de mis queridas amigas con quien ya tuve la oportunidad de dividir mi hogar y que construímos allí un hogar de verdad.

Aquí fue mi primera casa cuando llegué de Brasil, Agosto de 2003, Phoenix AZ. Daniela (a la derecha) todo era hecho con total armonía. Desde las finanzas, mercado todo dividíamos, hasta mismo las cosas personales, día de limpiar era en el mismo día. Fueron aproximadamente un poco más de 3 años, fui bien recibida por ella, creamos un cariño de hermanas una con la otra. 

Estando en Arizona, así como hicieron conmigo, yo pude colocar en práctica con todas las que llegaban al Estado. En la foto Carla y Josi. Carla (campera celeste) también, así que llegó de Brasil. Una chica dulce y que juntas aprendimos mucho. De igual manera Josi, ella es del mismo estado que yo, MT, ella se recordaba de mi como obrera, pero no tuve la oportunidad de conocerla en esa época. Y así tuve el privilegio cuando ella vino de California para AZ, también vivíamos en la misma casa y fue muy bueno.
Continuando en AZ, despedida de la señora Tania… en esta foto está Ivana (primera de la punta), Nice al lado de Carla, y Lili al lado de la señora Tania.
Miren que bueno, todas ellas ya vivieron conmigo, y todas tienen su perfume especial. Solo escapó Deise (a mi lado), pero aún así ella también fue una amistad que hasta hoy cultivamos.

Lorena con mi hijita Julie en sus manos y Vilma, en Dallas.
Hay muchas, solo que si coloco todas jaja quedará muy largo. Lo que quiero para en el día de hoy se resume en: para tener una buena convivencia, precisamos tener paciencia y respetar el espacio del otro. Cuando usted administra eso, no tiene problemas.
Hasta la semana que viene… Con cariño,
Renata Toledo.

Renata Toledo.



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