Como prometido en el artículo anterior, ahora vamos a hablar de algunos consejos sobre cómo convivir en el hogar, en caso de vivir con otra pareja, para que haya paz y armonía.
Usted pidió que hablara, entonces allí vamos:
* La regla de oro: respeto. Aprender a respetar la individualidad y la privacidad de las personas con las que vive, la casa es de las dos, pero nunca entre en el cuarto de la otra persona, allí está sus cosas personales, es el único lugar que tiene sólo para ella.
* No imponga su voluntad, sea flexible, no puede ser todo a su manera, otras personas también tienen el derecho a elegir.
* Estar dispuesta a renunciar y a ceder, para esto debemos tratar a las personas que viven con nosotros como si fueran nuestra familia y no como desconocidos con quien tenemos que compartir nuestro hogar.
* Todas deben tener bien en claro en su mente que la casa en la que vivimos no es nuestra, pertenece a la iglesia y por esta razón nadie manda en la casa, ni debe tomar decisiones sin consultar a aquellos que también viven allí. Entonces todo lo que se fuera hacer en relación a la casa debe ser con unión y plena concordancia. No existe esa que, “yo vivía aquí primero, por tanto yo mando en la casa”; negativo, la casa está al cuidado de las dos.
* He visto a personas que hacen de su casa un hotel, salen de mañana para su iglesia, y vuelven por la noche y se encierran en su cuarto, sólo usan la casa para dormir, no convive con la otra esposa de pastor que vive con ella. Las dos viven en la misma casa, pero parecen desconocidas. Imagine que mal ambiente.
Si queremos ser familia, debemos actuar como tal, hacer compras juntas, cocinar juntas, sentarse a comer juntos, así es como actúan las familias, y no cada uno por su lado.
* Sea sensible a las dificultades de las personas, ayude a quien está de su lado. A veces la esposa quiere hacer tanto en la iglesia y se olvidan de servir al Señor Jesús en su propia casa, extendiendo la mano a quien está a su lado.
* Usted ya escucho la frase “oh perdóneme, pero en las mañanas no funciono”, que disculpa andrajosa para quien se levanta con cara cerrada y piensa que los demás tienen que soportar eso. Es muy desagradable despertar, salir de su cuarto feliz y encontrar a la otra persona con cara cerrada, no da ni siquiera buenos días. ¿Sera que si usted iba a la iglesia por la mañana, o a conversar con su líder, usted se atrevería a ir de cara fea? Yo lo dudo, entonces no lo haga con la otra esposa que vive con usted. Un día malo todo el mundo puede tener, ahora todos los días no es normal.
* No pierda la oportunidad de hacer nuevas amistades, y de dejar su huella en la vida de aquella persona con quien comparte el hogar.
*Sea limpia y ordenada, no deje sus pertenencias por toda la casa, no se olvide de que usted comparte la casa con otras personas.
No se olvide de hacer su casa un hogar dulce hogar.
“Si es posible, en cuanto dependa de vosotros, estad en paz con todos los hombres”. Romanos 12:18
Me gustaría que las esposas de los pastores añadieran más consejos, dejando su comentario, ayudará mucho.
¡Besos queridas! Viernes tiene más.
1 comments:
buenas Sra, es interesante leer su blogs y aprender mucho estar preperada para todo, tener caracter de mujer de Dios y valorar lo que el nos Da, es muy interesante y cierto lo que dice este mensaje porque todo lo bueno y recto comienza en casa, debemos vivir en paz y armonia con las demas personas.
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