Caza de venados

Hola amigas queridas, ¿cómo están? Que bueno es estar con ustedes y comenzar esta semana bien, con Jesús, pues si Él está en el control de nuestra vida, TODO va a dar cierto, ¿verdad?

Hace unos días leí sobre la caza de venados, lo que es muy común aquí en los EUA y encontré algo muy interesante y que me llamó la atención. En los tips que ellos dan para una buena caza, 3 de ellas y las más importantes fueron las que hicieron un “click” en mi cabeza en el momento que las leí, lean conmigo:

*El primer tip es: Ser muy silencioso, cuidar de no hacer ningún ruido y ser paciente.

*El segundo tip es: Eliminar de todas las maneras posibles su propio olor. Bañarse con jabón sin olor y cuidar para no sudar y quedarse en contra del viento, para no esparcir su olor.

*El tercer tip es: Siga la sangre.

Creo que usted debe de estar pensando: ¿Qué tengo yo que ver con todo eso? Bueno amigas, déjenme explicarles lo que hizo un “click” en mi cabeza cuando leí estos tips ¿Ustedes pudieron percibir que esos 3 tips son los mismos usados por el diablo para derrumbarnos? Así es amigas, voy a explicar:

Tip1: Ser silencioso. El diablo no llama la atención hacia él en nada, él tiene todo bien planeado. Él es muy paciente y espera el momento cierto para atacar. Él llega sutilmente. Pone aquel pensamiento errado, sutilmente, te hace ver cosas que no existen, sutilmente… todo lo hace sutilmente. Esa es su estrategia: sutileza y paciencia.

Tip2: Eliminar su olor. El diablo hace de todo para camuflar su actuación. Él hace todo ciertito para que parezca que aquel pensamiento malo en su cabeza, usted mismo lo creó. Hace parecer que aquella persona que habló mal de usted, es porque ella está conspirando el mal en contra suyo, o que aquella persecución es normal, que aquella idea de ir a otras Iglesias es normal, que mantener amistades con personas del mundo es normal, que oír solamente canciones del mundo no tiene nada de malo, y etc. El diablo hace que todo parezca normal, que es así  y que nada de eso es a causa del diablo que está actuando. El diablo elimina su peste de todo y hace que las personas piensen que son sus propios pensamientos, que son las situaciones, las circunstancias y que no tiene nada que ver con el diablo: “No seas tan creyente, muchacha.” ¿Ya oíste eso?

Tip3: Siga la sangre. Una vez que el diablo consigue atacarte, él descubre el punto vulnerable, el punto débil y es por ahí que va a desangrar. Entonces, el diablo que no es nada bobo, va a continuar atacando justo allí, porque sabe que es la mejor manera de tumbarte.

Entonces, sabiendo de todo eso, ¿qué vamos hacer? VIGILAR. Esté atenta a su punto débil, descúbrelo. Dude de la duda que anda por su cabeza, evalúe sus pensamientos. Tenga cuidado con sus ojos y corazón. Guarde sus labios de hablar lo que el diablo quiere que usted hable. Vigile en quien usted sigue y quienes son sus amigas (aunque sea de la Iglesia, si hay algo que no concuerde con nuestra fe, córtela). Vigile las cosas que usted ve en la Internet, pues no todo es lo que parece. Vigile las cosas que usted da Like en Facebook e Instagram. Guarde su mente y su corazón. No deje que el diablo mande en su vida a través de pensamientos y dudas. Vamos a mandarlo para el infierno y cuidar de nuestra salvación, de nuestra vida espiritual más que todo, pues sin ella no podremos entrar en la vida eterna y yo te pregunto: ¿vale la pena usted quedar todo ese tiempo adentro de la Iglesia y en el final ir para el infierno? No amigas, entonces, vamos a cuidar de lo más precioso que tenemos: nuestra salvación.

Seamos fuertes, sabias, temerosas de Dios, así, vamos a ver rapidito las trampas del diablo y no vamos a ser ninguna presa para él. Que Dios las bendiga y hasta semana que viene.

Juliana Furucho