Hola queridas ¿Todo bien?
Este post será diferente, pues compartiré con ustedes la foto de mi hermana Filipa ¡antes y después!
Quiero que sepan algo, cuando viví con ella todos aquellos momentos difíciles, dentro mío yo nunca desistí de ella, en ningún momento renuncié a su alma, y cuando la entregué en el Altar los resultados fueron evidentes. Quien acompañó los posts sabe de lo que habló, quien no los leyó, no deje de hacerlo.
Nunca desista de un alma y haga su parte, que Dios hará la de Él.
Fueron algunos años de lucha, ¡pero tengo muchos más para disfrutar de la victoria!
Visualice por la fe la transformación de su hijo (a).
Besos dulces, hasta la próxima semana.
Catia Rubim
Nunca debemos desistir de nuestro familiares por más que la lucha sea difícil debemos hacer nuestra parte que es orar, sacrificar, hacer votos con Dios pues Él cuidará de ellos y hará la parte que nosotros no podemos hacer, y Dios a su tiempo dará la victoria pues Él nunca falla.
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